jueves, 17 de julio de 2014

Fantasías urbanas

Cada rincón guarda un secreto. Y en Lima los rincones son tan insospechados como los personajes que los habitan: extraños, cautivantes y misteriosos. Una suerte de ángeles y demonios (probablemente más de los segundos) a los que ya estamos acostumbrados.
El espacio público en escena
Resulta difícil de imaginar, pero en la ciudad jardín hay lugar para la fantasía
Esa esencia aparece en “La calle es nuestra”, divertido y mordaz retrato sobre nosotros mismos (el crisol limeño), sus defectos, virtudes y sus personajes silvestres y excéntricos.
Este espectáculo itinerante se inspira en la riqueza sensorial de los espacios urbanos, resistido, a veces, en la estética teatral. Aún quedan dos funciones (el 23 y 30 de julio) para apreciar este montaje grácil y colorido sobre una ciudad de cielos grises y paredes desteñidas.

Nosotros mismos
La propuesta no propone un rumbo exacto. Sus cuatro historias narradas –y levemente teatralizadas– describen con ironía y desenfado a la centenaria villa. Unos cuentos escritos por los narradores-actores fueron el punto de partida de la puesta a la que se añadieron elementos escenográficos.
"La calle es nuestra"
Leny Luna Victoria y Renzo García son voces plausibles con una imaginación desbocada
Su narración brilla sobre los pocos elementos y sus ágiles performances les basta para recrear la vida ajetreada de sus personajes-moradores
El resultado es lúdico.
Divierte, emociona y sorprende, aunque no al punto de lo esperado. En parte, como reconoce el director Raúl Durand en el programa de mano, porque la puesta fue pensada como una intervención urbana para fugaces transeúntes. Es probable que el montaje pierda un poco de fuerza dramática pero gana por el aporte creativo de otros recursos.

Rumbos citadinos
Su estética (visual, plástica y sonora) urbana deleita y potencia imágenes sólidas y reconocibles. Los rápidos movimientos le confieren un ritmo acentuado, mientras que su sarcasmo y lógica ficticia –que pudo haberse explotado más– no subestima al espectador.
Leny Luna Victoria y Renzo García
Lo sumerge en una collage de estampas urbanas combinadas con relatos universales como Alicia en el país de las maravillas o ciertos desvaríos espacio-temporales
Esa transgresión funciona en la geografía limeña cuya realidad (intimidante y tétrica) supera a la innocua ficción.
Con “La calle es nuestra”, el Colectivo Lima en Movimiento rescata al espacio público en una incursión escénica que debería verse más a menudo en las tablas. Para su equipo creativo, refiere el programa, “la calle puede ser un refugio o una trampa, la libertad o una prisión”. Saben que en esos rincones habita su inquieto espíritu urbano.

Crédito de fotografías: Víctor Idrogo / La calle es nuestra

Ficha escénica
La calle es nuestra”, con textos de Leny Luna Victoria y Renzo García
Dirección: Raúl Durand
Elenco: Leny Luna Victoria y Renzo García
Diseño de Arte: Fiorella Franco y Bruno Binda
Asesoría Literaria: Carlos La Rosa
Diseño de sonido: Rodrigo Sarmiento
Diseño de luces: Igor Moreno
Funciones: Miércoles 9, 16, 23 y 30 de julio a las 8pm
Lugar: Centro Cultural El Olivar (Ca. La República 455, San Isidro)
Producción Ejecutiva: Rosa Mosquera
Entradas: S/. 20 (general) y S/. 12 (estudiantes y jubilados)
Informes al correo colectivolimaenmovimiento@gmail.com
Una producción del Colectivo Lima en Movimiento

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