Luego de una vertiginosa carrera
teatral, los Hermanos Marx (Groucho, Chico y Harpo) alistaron su salto a la
pantalla grande poco antes de la Gran Depresión. Aún era 1929 y en Estados
Unidos nadie adivinaría la revolución cómica que sucedería en aquellos años en
los que era mejor reír que revisar los bolsillos. Para los Marx todo era una
apuesta. Y esta era una que no pensaban perder.
La genialidad y la locura, marcas genética del grupo, los avalaba
pero no bastaba. Hacía falta un productor arriesgado o, si quiera, valiente.
Esa
azarosa búsqueda es recreada con ingenio, humor y momentos reales en “Una noche
con Groucho Marx”, brillante reposición vista antes en 2012.
Escrita y dirigida por Gonzalo
Benavente Secco, la puesta entra en su últimas cuatro funciones (va hasta el
lunes 10 de marzo). Un ejercicio cuasi histórico e histriónico –y un nostálgico
homenaje al cine de los años 20, 30 y 40– que engalana el escenario del Centro Cultural de la PUCP de San Isidro en plena celebración por sus veinte años de
fundación.
Enredos
y confusiones
Sólo la hilarante y caótica chispa de
los Marx podría poner de vuelta y media a los vecinos de California. En la obra,
los hermanos buscan su primera experiencia cinematográfica, pero en su intento
se ven inmersos –como en su filmografía– en apuestas de caballos, singulares
estafas y los dilemas de una novia en un compromiso por interés.
Todo eso en un orden aleatorio. La puesta
deriva ágilmente entre dosis de oportunismo y picardía, crítica a la frívola sociedad norteamericana, ingenio, ironía e improvisación.
La estética bien lograda juega
sobre un ecran, privilegia secuencias de filmes como “Una noche en la ópera” (1935)
y utiliza efectos que remiten a la época. Crear un texto basado en frases extraídas
de películas y cobrar un significado en escena es mérito de Benavente, cuyo
trabajo anterior fue “En el jardín”, puesta en el CC. El Olivar en 2010.
Con esta segunda obra afirma su gusto por el cine (en 2013 escribió, dirigió, editó y produjo su
ópera prima: “Rocanrol ‘68”). Como los Marx, él se sale del libreto para romper con el tiempo, la realidad escénica
y jugar con la sorpresa.
Los
inclasificables
La elección de sus personajes es un
acierto equiparable a su aparición en escena. Quien lidera esta incontrolable banda
es Groucho Marx (una irreverente y aguda actuación de Pablo Saldarriaga). Verlo
en escena resuelve las dudas sobre cómo interiorizar un personaje icónico del
cine sin morir en el intento… cada noche.
Un desafío resuelto con temerario
acierto por un actor ocurrente y la riqueza de un personaje que finamente sacó de quicio a Hollywood.
Y es
que Groucho (Nueva York 1890 – Los Ángeles 1977) era un genio: su rapidez mental para los gags y su facilidad para improvisar parlamentos desconcertantes le bastaban para
convertir un piropo en un serio desplante.
El infaltable puro, el bigote y las
cejas gruesas, los lentes redondos y sus inconfundibles gestos configuran lo demás. Saldarriaga
se mimetiza y, por largos momentos, nos confunde con el verdadero Marx. Naturalmente,
Groucho, no está solo.
Pícaros
en aprietos
Chico Marx (un divertido rol de Daniel
Neumann) secunda cada ocurrencia del primero. Con un traje tirolés y un acento que
debería notarse más italiano, como en sus filmes, es un brillante maestro del desconcierto.
La escena de las contraseñas es sólo un aperitivo.
El cuarteto se completa con Harpo Marx (un buen trabajo de Fernando Luque como este impredecible hermano) y Zeppo Marx
(Luque en su segundo rol), quien solía aparecer como galán en las producciones
de los hermanos.
Aparece la actriz Margaret Dumont (precisa Grapa Paola), víctima preferida
de las bromas nada elegantes de Groucho. Las escenas melodramáticas cobran
fuerza en la indecisa novia Eva Laszlo (Carolina Cano) y en Victor Laszlo (un vital y ocurrente Carlos Cano), su padre y extraño anfitrión en una noche imposible. Observar cómo se (des)enreda
esta trama sin dejar de reírse es un serio desafío. Sólo basta oír algunas de
las grandes frases como la que reza a continuación.
“He
de admitir que he pasado una noche estupenda…
Pero
no ha sido esta”.
Ficha
artística
“Una noche con Groucho Marx”, de Gonzalo
Benavente Secco
Dirección: Gonzalo Benavente Secco
Elenco: Pablo Saldarriaga, Daniel
Neumann, Fernando Luque, Carolina Cano, Carlos Cano y Grapa Paola.
Lugar: Centro Cultural PUCP (Av.
Camino Real 1075, San Isidro)
Producción general: Centro Cultural
PUCP
Fotografías: Centro Cultural PUCP
Las funciones van de jueves a lunes a
las 8pm
La temporada culmina el 10 de marzo
Más información en el evento de la
obra
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