martes, 18 de febrero de 2014

Aventura andina

Observar una pieza infantil, con ojos de adulto, puede ser un delicado reto. En especial, si se busca alejarse de las manidas adaptaciones de cuentos clásicos (‘exportadas’ desde el mágico mundo de Disney), a la espera de un teatro infantil con rumbos reveladores e inesperados. 
Cabe preguntarse si los niños son atrevidos, ¿por qué no atreverse en una obra que desestime los recursos más comunes? 
“Miranda y Leo en una aventura fantástica” es un buen ejemplo de ingenio, originalidad, síntesis de referencias sin prejuicios o clichés en escenaBasado en el relato de Rafael Anselmi y dirigido por Javier Valdés, este divertido montaje estuvo presente en el XIII Festival de Teatro Infantil del ICPNA del Centro de Lima que culmina este 22 de febrero.

Niños valientes
Miranda (adorable papel de Úrsula Palomino) y Leonardo (un siempre enérgico Nicolás Valdés) han viajado al Cusco a visitar a su abuelo Totó (grata aparición de Carlos Tuccio en un montaje infantil). Acompañado de Paulina (Magali Bolívar), el anciano recibe a sus traviesos nietos, sin imaginar que su casa está habitada por entidades malignas y temidas.
Surge entonces una pugna difusa entre el bien y el mal con personajes cálidos e inteligentes. Los antagonistas, por ejemplo, fueron concebidos bajo una óptica tétrica y humana
Encarnan la maldad con cierta candidez, les aterra la soledad de su encierro, pero sucumben a la apacible lógica infantil de los juegos y las bromas.
Georginacha, la Jarjacha (Alexa Centurión) es tirana y tierna, en el fondo; Pitricha, el Muki (Martín Martínez) es travieso e intimidante; y Rafuchay, el Pishtaco (Bruno Ocampo) es juguetón aunque desconfiadoLos dos niños y el abuelo, en cambio, representan la inocencia que se mimetiza con el imaginario andino, la naturaleza y las tradiciones locales.

Nuevos códigos
“Miranda y Leo” es una puesta grácil y cómica, y como tal aprovecha todas las claves de un montaje infantil. Son notables el uso del teatro de sombras (mérito de El cantar del Cárabo) al principio y la musicalización (trabajo de Magali Luque) en varios pasajes de la obra.
La estética andina y los códigos limeños tejen una historia maravillosa asentada en las alturas andinas
Citar la escena del pago a la tierra para motivar los valores como la generosidad o la lucha por libertad de los seres andinos imaginarios es una clave aleccionadora en la puesta.
Incluso, el final es un ejemplo de coherencia cuando el elenco recibe aplausos del público. A ojos de un adulto, Miranda y Leonardo son dos niños valerosos que, como su equipo creador y pluridisciplinario, desafían los eternos clichés partiendo desde nuestra esencia (andina y costeña) sin perder de vista las ágiles miradas de su público.

Ficha artística
“Miranda y Leo en una aventura fantástica”, de Rafael Anselmi
Dirección: Javier Valdés / Dirección adjunta: Carlos García Rosell
Actúan: Úrsula Palomino, Nicolás Valdés, Carlos Tuccio, Magali Bolívar, Bruno Ocampo, Alexa Centurión y Martín Martínez.
Obra presentada en el XIII Festival de Teatro Infantil del ICPNA